Entre la chispa y la hoguera by April Genevieve Tucholke

Holaaaaaaaa a todooooooos! ¿Cómo han estado? Yo me estoy derritiendooo. Ya me cansé del verano, que vuelva el invierno urgente.

Finalmente, después de como dos meses, hoy vengo con una reseña. Woohoo!!! Festejen, que me llevó mucho esfuerzo juntar ganas para sentarme a escribir, últimamente solamente quiero estar tirada en la cama y mirar Arrow u.u

Vamos con la reseña…

Sinopsis: 

Una joven cuya vida cambió radicalmente. 

Un demonio que está causando estragos.

Episodios siniestros.

Un road trip trepidante, 

que los dejará 

entre la chispa y la hoguera. 

Para los que no saben, este libro me lo regalaron justo después de haberme ganado el primero en un sorteo por el aniversario del blog Real or Not Real Books, así que leí ambos de un tirón.

La historia comienza en época navideña, con una familia White se está preparando para festejar las fiestas a pesar de que todo cambió desde que River y Brodie se fueron. Violet continúa con la esperanza de ver regresar a un River que es capaz de controlar su resplandor; Luke, su hermano gemelo, finalmente sentó cabeza y tiene una relación seria con Sunshine; Jack, el pequeño que “adoptaron” como uno más en el primer libro, se ha adaptado como todo un White; y Neely, el hermano menor de River, continúa en su búsqueda, intentando protegerlo de Brodie y de sí mismo.

En esta continuación Violet está decidida a buscar y encontrar a River después de estar tanto tiempo esperándolo, sin hacer nada, dejando que pasen los días y meses. Violet comienza a escuchar una radio durante las madrugadas, Theo Ojos Abiertos, quien comunica todas las cosas extrañas que suceden, como hombres con ojos fogosos y patas de cabra que roba sueños a las jóvenes en un pueblo. Violet decide que seguramente muchas de esas apariciones son culpa de Brodie o River, así que fuerza a todos a embarcarse en un road trip para encontrarlos a ambos.

Durante el road trip conocen a otros jóvenes, como Pine, Finch y Canto, quienes se unen en su búsqueda. Se adentran en lugares escalofriantes, descubriendo en el camino secretos en el diario de Freddie, su abuela, que plantean ciertos interrogantes que le añaden un plus a esta historia.

Este libro realmente me decepcionó. O sea, no me gustó para nada el primero, pero fue mejor que este. Después del cliffhanger con el que terminó Entre el demonio y el profundo mar azul, nos volvemos a encontrar con una Violet White que se siente completamente sola a pesar de estar rodeada de amigos y familia. Ella extraña a su demonio, al psicópata de River, quien se marchó y dejó su corazón vacío y triste, pobrecita. Se fue en busca de Brodie, un psicópata incluso peor que River (increíble); Brodie, quien lastimó y mató a mucha gente solamente para divertirse.

¿Qué es lo más lógico que debería hacer Violet? Esperar a salvo en su casa, con sus amigos y su familia, hasta estar segura de que Brodie ha sido vencido. Sin embargo ella decide ir en busca de River y de Brodie, porque obvio, se cansó de esperar *tas re loca hermana*

El slut-shaming desapareció, pero no porque Violet se convirtiera en una mejor persona, sino que debido a que la personalidad de Sunshine dejó de existir. Sunshine cobró tan poca importancia como una arañita pequeña que está en la esquina de una habitación. Ni existió. Eso fue malísimo, o sea, Sunshine no tuvo graaan protagonismo en el primer libro pero algo había, en este directamente era una mención aquí y allá y listo.

Violet sigue igual de molesta que en el primer libro, con grandes introspecciones que no llevan a ningún lado y, encima, en este libro se le suma que comienza a leer el diario de su abuela cuando era joven y se entera de muchos secretos familiares. ¿Le añadió esto algo a la historia? Absolutamente nada. Rellenaron hojas al pepe con la clara intención de que parezca una historia compleja y bien entrelazada pero terminó siendo una sopa en la que le tiramos muchos sucesos, mezclamos, y quedó… un mamarracho.

Nada tuvo sentido, era desastroso. Casi que no existe la trama, y no porque el libro fuera complicado, como ya dije. La mayor parte de la historia fue algo más o menos así: los personajes deciden que Brodie o River están en Maine o Colorado. Van a Colorado a investigar pero, al llegar, de repente Violet le dice a Neely que tienen que ir inmediatamente a Maine. Así que, ¿qué hacen? Se marchan a Maine como si nada, sin hacer demasiadas preguntas porque si Violet dice que hay que ir a Maine, ellos se van a Maine. Así todo el tiempo. Sin sentido alguno. Sin explicaciones.

Todavía no hablé de la idea de la autora de crear un triángulo amoroso entre River, Violet y el hermano de River, Neely. Malísimo. No, no malísimo, mediocre y previsible. Yo sabía que iba a hacer eso pero esperaba equivocarme. No quiero ni dar detalles de esto porque me enojo.

Al primero logré encontrarle cosas positivas con mucho esfuerzo, con esta secuela me fue imposible. Todo lo que encontré fue el viaje en auto de un grupo de jóvenes con un plot twist muy estúpido y un final que, además de no tener sentido, consiste directamente en otro cliffhanger. O sea, la historia comenzó con ciertos problemas y terminó igual. Igual. Leí el libro por nada. Menos mal que la autora dijo que no iba a haber tercer libro. O sea, comenzó una historia que no piensa terminar. Es inentendible realmente.

No le recomiendo a nadie estos libros. Lo único bonito de ellos son las portadas (?) No le puedo dar 0 cupcakes pero creo que sí puedo darle 0,5 no?